
No cabe duda que aunque casos se presentan al contrario, más tiende a predominar la preferencia por la familia sanguínea. Evidencias hay de no pocos eventos en los que las personas celosas recíprocamente recurren a las intrigas (mentiras, chismes, montajes, denigraciones y más) buscando la forma de indisponer la una a la otra ante la pareja que, digamos, genera el conflicto cuando dispensa preferencia hacia cualquiera de las dos partes en celos; y puede ser para, como se dice coloquialmente, ganar indulgencias con quien decide a quién dar más o menos o por igual; indulgencias que pueden ser en aras de que la balanza se incline a favor de uno de los actores, o de pronto hasta pretendiendo que la considerada "competencia" resulte alejada (por voluntad propia o no) del lado de la persona protagonista de la película. Nada raro de darse, pues gente muy creativa y ensañada hay para hacer males... Repito, conflictos se pueden conjurar en la medida en que se procure que haya equilibrio racional; pues, quiérase o guste o no, las dos partes que puedan caer en los mencionados celos tienen derecho sobre todo en lo concerniente al afecto y a la atención.
No comments:
Post a Comment